viernes, 17 de diciembre de 2010

Finalizó la huelga de hambre, comienza la discusión


(AW)Tras 53 días de huelga de hambre de siete estudiantes y una lucha tenaz que recogió apoyos de distintos ámbitos de nuestro país y del mundo, el Servicio Penitenciario Federal se avino a devolver parte de lo que había robado, avasallado y desarticulado, material y simbólicamente, además de firmar un acuerdo específico con la Universidad de Buenos Aires. "Tenemos claro que esta instancia no representa la resolución del conflicto aunque brinda el plafón necesario para continuar en el camino", expresaron los ex huelguistas quienes siguen la batalla por recuperar la totalidad de las condiciones históricas de autogestión en el Centro Universitario Devoto. En esta entrega, publicamos la carta de los siete compañeros y el texto de Leandro Halperín, director del Programa UBA XXII Educación en Cárceles. Ambos enfoques, refieren a la etapa concluida y a persisten en pelea "Por la libertad de pensamiento, y por el pensamiento para la libertad".



Querid@s compañer@s:

Ayer martes 14 de diciembre de 2010, nos anoticiamos de la firma del convenio complementario entre el rector de la UBA y el Ministro de Justicia, que significa una base contractual a partir de la cual se vislumbra posible comenzar a definir las condiciones de una resolución al conflicto surgido en el Centro Universitario Devoto.

En un principio e implementado partes de dicho acuerdo, a las 15:00 horas del ayer fueron restituidas a su espacio (el aula de Computación dentro del CUD) las computadoras pertenecientes a la Facultad de Ciencias Exactas que habían sido trasladadas por el SPF.

En razón de lo reseñado, los abajo firmantes decidimos suspender la medida pacífica de protesta ("Huelga de hambre") que venimos sosteniendo desde hace 53 días, quedando dispuestos -como lo fue desde el principio- a dialogar con las dos instituciones firmantes del "convenio" para arribar a una resolución consensuada del conflicto planteado.

Tenemos claro, entonces, que esta instancia no representa la resolución del conflicto aunque brinda el plafón necesario para continuar en el camino.

Consideramos que ahora comienza la etapa en la que todos los actores de este Programa debemos sentarnos a la mesa de negociación y trabajo para:

• Analizar lo sucedido y determinar las responsabilidades institucionales en el desastre provocado unilateralmente por el SPF.
• Recuperar las condiciones de autogestión y autonomía históricas de este Centro Universitario Devoto.
• Redactar y elevar para su promulgación un proyecto de Ley nacional que regule la actividad de la educación universitaria en contexto de encierro.Estamos al borde del receso universitario y judicial. Sabemos que de aquí en más las represalias en forma de traslados, bajas de conducta u otras maniobras estarán a la orden del día aquí en la cárcel. No tenemos miedo. Nunca lo tuvimos. Tenemos, como siempre, plena conciencia de los riesgos y de nuestros derechos inalienables. Y sobre todo, la voluntad férrea de defenderlos.

Peleamos cada día contra la despersonalización que propone esta institución total y contra la alienación que campea dentro y fuera de los muros. Esta experiencia nos ha marcado el cuerpo pero también nos templa el coraje y la conciencia y la alegría de sabernos acompañados.

A tod@s aquell@s con quienes compartimos este camino de lucha y dignidad les decimos que los llevamos en el corazón por siempre, que reconocemos profundamente cada acción que se ha realizado y el esfuerzo personal de cada un@ puesto a lo largo de estos meses. Que no hay final, hay un recorrido que seguiremos haciendo juntos en todas las actividades académicas y políticas que aún quedan por delante.

Por la libertad de pensamiento, y por el pensamiento para la libertad, los saludamos con fuertísimo abrazo fraternal.

Rodolfo, Fabio, Juan Carlos, Jorge Luís, Gastón, Martín y Diego


HALPERÍN

"Reanudar el diálogo con todos los actores"

En el día de la fecha el Ministro de Justicia y Derechos Humanos remitió a la Universidad de Buenos Aires el acuerdo suscripto con el Rector de la UBA (que se adjunta). La firma del mismo, por parte de las máximas autoridades de ambas instituciones, permite reanudar la casi totalidad de las actividades del Programa UBA XXII suspendidas unilateralmente por el Servicio Penitenciario Federal en el mes de septiembre, a la vez que objetiviza las condiciones de acceso y permanencia de las personas privadas de libertad a las actividades curriculares, de extensión universitaria y extracurriculares que la Universidad Pública ofrece en las cárceles federales ubicadas en la zona metropolitana.

Al mismo tiempo consideramos que las nuevas condiciones, mínimas e indispensables, permiten reanudar el imprescindible dialogo que debe existir entre todos los actores involucrados en la cuestión.

Queremos agradecer a todos los que manifestaron su compromiso con la plena vigencia del Programa UBA XXII, tanto a los que demostraron su plena solidaridad como a aquellos que honesta y transparentamente plantearon sus dudas y críticas.

Sabemos que hemos elegido el camino más difícil, burlar el abismo de lo inevitable; no hemos elegido sentarnos a esperar y ver como el sistema penal concreta su macabra labor y logra que las personas privadas de libertad reincidan en el delito. Sostener el rumbo contrario no resulta sencillo, y en ocasiones ni siquiera cuenta con el respaldo de los actores institucionales que tienen la responsabilidad de hacer de las cárceles federales un lugar en el que los Derechos Humanos vayan ganando día a día terreno en una disputa que se presenta a todas luces como desigual.

Seguiremos sosteniendo nuestros principios, defendiendo nuestras convicciones y ejerciendo nuestras representaciones institucionales con las herramientas que nos brinda la Democracia, aquella que pretendemos que entre sin los límites que la ley no tolera tras los muros de las cárceles de nuestro país.

Nos seguimos encontrando.


Leandro Halperin

Director
Programa UBA XXII